Es la luz de la mañana que veo sentado en la mesa del château la que me hace desear de nuevo, al verla caer sobre las migas de pan, las copas con pozo de vino y el queso mordisqueado por roedores, los cuerpos de esas dos mujeres como si fueran […]
Ficción
Demasiado tarde, siempre
Demasiado tarde, siempre, porque aunque hiciésemos tantas veces el amor la felicidad tenía que ser otra cosa, algo quizá más triste que esta paz y este placer, un aire como de unicornio o isla, una caída interminable en la inmovilidad. (…) pero no, lo que verdaderamente me exasperaba era […]
Into de wild
Sesenta años. Los cumples bien, a pesar de que tu celebración esté algo más poblada de lo necesario. Juan siempre quiere invitar a todos los amigos del grupo, y dejaste que se encargue. A él le encanta festejar, tú prefieres el trabajo. Eres buena en lo que haces: escuchas a […]
¡Tongo!
Era la cosa más improbable del mundo que hubiese venido buscándome, y sin embargo me había encontrado. Pero no sé si me reconoció y por eso hablaba de esa manera mandona y basta, expeditiva, como en un despacho le habla a la becaria un cliente de poco rango. No sé […]
Sin asunto
Hago todo lo posible por evitar escribirte a pesar de que esto es precisamente lo que mi alma necesita para siquiera espiar más allá de este agujero en el que se encuentra. Será una carta vanidosa y tremendista y errática. Sin decoro. Como dice tu poeta, ni con delicadeza […]
Una temporada de fe perfecta
A mi viejo le falló el corazón un día que jugaba Perú contra Ecuador. Cuando bajé a calentarme mi tamal lo vi en su estudio, llamando a su cardiólogo. Me dijo que se iba al hospital, que el doctor estaba llegando para llevárselo. Era jueves por la mañana, los bocinazos […]
Lo que intentas olvidar
El viejo se ha levantado de madrugada. Ha vuelto a ensuciar sus calzoncillos. Tu nariz lo percibe desde la cama de al lado. Hace meses que dejaste de tomar la dosis de alprazolam que te recetó el neurólogo. Necesitas despertar por si el viejo necesita algo. Porque a veces, sin […]
El desalojo
Cuando el dueño de la inmobiliaria se presentó en mi puerta, ya había comprado casi todos los departamentos. Pascasio es propietario de la mitad de Santa Lucía. Se trata de un tipo envuelto en un halo de anécdotas nauseabundas. Apareció vestido de guayabera, una sonrisa y un papel en la […]
Volver
—Estás muy linda —creo que dijo. Jugaba Peñarol. El bar estaba a reventar de gente y de olor a mozzarella. En las mesas se apilaban los vasos y las botellas de cerveza vacías. Nadie comía. Supongo que es imposible pero juraría que todos los presentes tenían la misma cara y […]