En un mundo ‘empantallado’, cobra una belleza casi mitológica el poder de la tinta sobre el papel. A este arte se ha dedicado a lo largo de más de 70 años el dibujante belga PIerre Alechinsky, aclamado en Europa por una libérrima trayectoria asida a la experimentación técnica con la tinta como único canal para el arte.
Ahora el centro Pompidou de Málaga dedica la mayor retrospectiva celebrada fuera de Francia a este artista que, desde finales de los años 40, primero como parte del movimiento Cobra, ha venido convocando humor y poesía en obras que van desde el empleo de la técnica gouache al acrílico, pasando por soportes inesperados y la tinta china.
Su movimiento fuido, propio de la caligrafía oriental, se traduce en su trabajo en paisajes oníricos, seres grotescos, mapas y figuras quiméricas. ‘Alechinsky en el país de la tinta’ recorre a través de 75 piezas del Cabinet d’Art Graphique la producción y la evolución de un maestro que asegura que «dibujar es interrogarse». Así, el espectador se enfrenta al bello enigma que plantean las piezas, juegos surgidos del placer y del fulgor del dibujo.
Alechinsky en el país de la Tinta. Dibujar es interrogarse
Centro Pompidou de Málaga
(Pasaje Doctor Carrillo Casaux, s/n29016, Muelle Uno, Puerto de Málaga)
Del 19/12/2019 al 12/04/2020
De 9.30 a 20 horas de martes a domingo. Lunes cerrado.