San Lázaro

XIV

hay en mi cuerpo un blanco
cuántos se congregan en él
y planean quién soy
es mi cuerpo un blanco
purísimo llaga brillante
extendida desde la frente
al suelo
innumerables tirotean a la sien
un no sé qué
me deshago
en tripas
este cuerpo solo este cuerpo
rompiéndose
soy yo

XXVI

esta herida no es un simulacro
la laméis con fruto en cada
golpe de sílaba
hundid la boca aquí tocad
de fuera palpitando las entrañas

XXIX

si me escribo me dinamito
en tantas como ojos
materia carne
materia lengua
estallando en la boca
como fruta nueva
y hay verdad
en la mitología
y estoy
donde no

XXXIII

ya soy un perro
en llamas
desgarrando
la niebla de mi carne
ya fermenta
en mi boca
cada lágrima
de ceniza
ven aquí
prometo estar siempre
estallando
ven